Al llegar los meses fríos del otoño e invierno aumentan de forma considerable las infecciones respiratorias, sobre todo víricas. Las razones de que ocurra esto son las siguientes:
– El frío modifica las condiciones circulatorias de la mucosa nasal, provocando una vasoconstricción que disminuye el flujo sanguíneo a la zona y, por lo tanto, el aporte de nutrientes y de células, incluidas las células inmunitarias. La consecuencia final es que se facilita la entrada de microorganismos por haber empeorado nuestras defensas.
– En estos meses (y ya lo estamos notando con Álex…) tendemos a reunirnos durante bastante tiempo en lugares cerrados y poco ventilados: bares, locales, cines, aulas… siendo el factor que más influye en la propagación de estas infecciones.
Reforzar nuestro sistema inmunitario es la mejor manera de prevenir infecciones. Tenemos que asegurarnos tener un buen sistema defensivo frente a las agresiones biológicas externas; un sistema que sea capaz de minimizarlas y neutralizarlas para evitar su propagación por nuestro organismo y evitar el escenario que no deseamos: estar enfermos. Para ello, vamos a recopilar algunos consejos naturales que contribuirán a dar fuerzas a nuestro sistema inmune.
LACTOFERRINA
Es una glicoproteína que protege contra una serie de infecciones, evitando de esta manera que virus y bacterias se cuelen en las células. Normalmente se encuentra en el calostro y en la leche. Posee la cualidad de unirse al hierro y se le considera una molécula con acción antimicrobiana, antioxidante, antiinflamatoria y con propiedades sobre la regulación del sistema inmune.
En resumen, la lactoferrina posee una acción preventiva eficaz de las infecciones, ya que es capaz de:
– Actuar sobre nuestro sistema inmune, modulando su actividad para que nos proteja mejor.
– Actuar directamente contra los patógenos impidiendo su entrada a nuestro organismo.
HONGOS
Seguro que habrás oído hablar alguna vez del Reishi, Shitake, Maitake, Chaga, Melena de León… En general los hongos son ricos en beta-glucanos (1,3/1,6-D-glucanos), polisacáridos muy estudiados, con amplia bibliografía científica que avala su acción inmunomoduladora, entre otras acciones importantes a nivel sistémico.
Podemos decir que contribuyen a modular tanto la inmunidad celular como la inmunidad humoral y presentan una actividad antioxidante potente.
QUERCETINA
La quercetina es uno de los flavonoides más ampliamente difundido entre los alimentos utilizados por el ser humano, y está presente en altas concentraciones en los ajos, las manzanas y el té.
La quercetina ejerce su actividad antivírica y reduce la inefectividad inhibiendo alguna de las proteínas esenciales para la replicación de los virus. Se ha observado que la quercetina posee actividad inmunomoduladora.
PROBIÓTICOS
¿Dónde se encuentran? Así es, en el intestino es donde reside entre el 70 al 80 % de nuestro sistema inmunológico.
Además de mejorar la salud digestiva, hay muchos estudios en los que se ha evidenciado que el uso de cierto Lactobacillus, como L. rhamnosus, L. plantarum, L. acidophilus, L.casei, L. paracasei y de ciertos Bifidobacterium. Todos ellos juegan un papel importante a la hora de prevenir infecciones de las vías respiratorias, además de observarse un acortamiento en la duración de los procesos y una disminución de la severidad de los cuadros.
Si tienes dudas sobre cómo ayudar a tu organismo para prepararse ante los típicos resfriados de estas fechas, no dudes en pasarte por Herboristería La Salud y preguntarnos sin problemas.