Los aceites esenciales ofrecen muchas y distintas propiedades y algunos de ellos cuentan con indicaciones específicas para tratar patologías típicas del invierno.
Una característica muy apreciada en los aceites esenciales es que actúan en el organismo de forma global, contribuyendo a reforzar todos los sistemas y a estimular las defensas naturales.
El simple hecho de dispersarlos en una habitación con un difusor de aromaterapia permite eliminar los microorganismos de la atmósfera evitando los contagios. De igual forma pueden emplearse por vía tópica o incluso oral para estimular la producción de inmunoglobulinas, los famosos anticuerpos de nuestro sistema inmunitario. Si ya es demasiado tarde y los virus o las bacterias han comenzado a colonizar el organismo, las propiedades antivirales y antibacterianas de ciertos aceites esenciales conseguirán eliminarlos eficazmente a la vez que se tratan los síntomas con plantas expectorantes, mucolíticas e incluso analgésica.
- ACEITE ESENCIAL DE JENGIBRE
El Jengibre (zingiber officinalis) se ha utilizado durante miles de años, especialmente en Oriente, como remedio para el tratamiento de muchas enfermedades. De hecho, en la actualidad es apreciado porque ayuda en la digestión, para el tratamiento de dolores musculares y para reforzar el sistema inmune. Muy útil para prevenir gripes, resfriados y otro tipo de infecciones y mantener nuestro estado de ánimo.
Consumo: la proporción es 10 ml de base vegetal de primera calidad y 5-6 gotas de aceite esencial de jengibre.
- ACEITE ESENCIAL DE EUCALIPTO
La congestión nasal debida a las gripes y resfriados o simplemente provocada porque las calefacciones resecan las mucosas y vías respiratorias es una molestia que puede ser paliada gracias al aceite esencial de eucalipto. Podemos emplearlo en un pulverizador, o también podemos impregnar una gasa o algodón y colocarlo en la mesilla de noche para ayudarnos a respirar mejor durante las horas de sueño.
- ACEITE ESENCIAL DE LIMÓN AMARILLO
Los alquimistas comenzaron a utilizar el aceite esencial de limón (citrus limonum) como ingrediente medicinal para ciertas dolencias y afecciones que presentaban. Entre sus propiedades destacamos que es analgésico, antidepresivo, antiséptico, antivírico, cicatrizante, antiinflamatorio y digestivo, entre otras. En cuanto al sistema inmunológico es ideal para la mucosidad, bronquitis y asma y además estimula la producción de glóbulos blancos. Si lo diluyes en el ambiente, te ayudará a mantener la mente despejada y lúcida.
Consumo: baños aromáticos: añadir 4-6 gotas de aceite en el agua para obtener todos los beneficios. Tomar el baño de 15-20 minutos.
- ACEITE ESENCIAL DE RAVINTSARA
Su capacidad antivírica convierte el aceite de Ravintsara en una buena opción en épocas de epidemias de gripe para los lugares concurridos, trabajo, reuniones familiares etc.
Posee un enorme potencial antivírico, incluso contra virus mutantes y al mismo tiempo es un aceite bien tolerado y bastante inocuo, siendo uno de los que se pueden utilizar para toda la familia. Es un bactericida, expectorante, estimulante inmunitario, anticatarral, rico en antioxidantes y apoya una función pulmonar saludable.
- ACEITE ESENCIAL DE PINO
Durante el invierno solemos ventilar durante menos tiempo nuestras casas, para no perder el calor acumulado en el interior. Esto hace que, en ocasiones, el ambiente en casa esté cargado y puede favorecer el contagio de virus si alguien en casa está pasando una gripe o resfriado. Una buena forma de purificar el ambiente es utilizando aceite esencial de pino. Podemos añadir 10 gotas a un pulverizador lleno de agua, agitarlo bien y pulverizar.
CÓMO APLICAR LOS ACEITES ESENCIALES:
-Se puede aplicar vía difusión atmosférica.
-Vía cutánea, se extienden unas gotas en la parte interna de las muñecas y antebrazos. Otros sitios son el tórax, el plexo solar (área encima del ombligo y debajo del pecho), el bajo vientre (la zona justo debajo del ombligo), estos dos últimos son una buena opción cuando se busca un reequilibrio energético. La planta de los pies, en la zona del arco interno, es otro excelente punto en el que elegir aplicar el aceite esencial, dos o tres gotas en cada pie, y también a lo largo, o a ambos lados de la columna vertebral.
-Aplicado mediante masaje (siempre diluido en un aceite vegetal)